Almafuerte y el metal pesado argento en Cipolletti

Almafuerte, la banda de metal más importante en la Argentina, se presentó el sábado Cipolletti. El conjunto liderado por el emblemático Ricardo Iorio eligió el conocido boliche Meet para desplegar su furia musical. El cantante junto a Claudio “Tano” Marciello, aclamado por numerosos medios como una de los mejores guitarristas que existen en el país, hicieron delirar a mas de dos mil personas vestidas de negro que presenciaron y colmaron el establecimiento.

Por Carlos López

Almafuerte, la banda de metal más importante en la Argentina, se presentó el sábado Cipolletti. El conjunto liderado por el emblemático Ricardo Iorio eligió el conocido boliche Meet para desplegar su furia musical. El cantante junto a Claudio “Tano” Marciello, aclamado por numerosos medios como una de los mejores guitarristas que existen en el país, hicieron delirar a mas de dos mil personas vestidas de negro que presenciaron y colmaron el establecimiento.

Pasadas las 6 de la tarde nublada, el fuerte viento, que no cesó en ningún momento, daba la bienvenida a los metaleros que se dibujaban en una larga fila ante las puertas aún cerradas del boliche. Los colectivos interurbanos, que llegaban por la ruta 22 tanto desde Neuquén como desde la dirección opuesta, iban depositando de a poco a los fanáticos que se reunían en pequeños grupos que mataban el paso del tiempo con alguna bebida.

Mientras el sol se ocultaba, la entrada al lugar del espectáculo fue habilitada. La gente entraba a paso lento, luego de un riguroso cacheo del personal de seguridad, para disfrutar de las bandas teloneras: Aonikenk, Crihsys y No somos Ángeles.

Mientras el ambiente del interior del lugar replicaba el exterior -una noche oscura-, el espacio que quedaba libre disminuía hasta casi no existir. Faltando veinte minutos para las 11, Almafuerte salió al escenario enloqueciendo a su público con Delirios del defacto. Durante más de una hora y media, Iorio ofreció un listado de temas que recorrió toda la discografía del conjunto. Los solos de guitarra, El visitante, Debes saberlo y Patria al hombro fueron las momentos que más hicieron vibrar el pogo. Aún así, Allá en Tilcara, de corte más tranquilo y folklórico, hizo emocionar a más de uno, como es el caso de Diego, un metalero de 30 años, que afirmó "no pude contener las lágrimas".

Iorio fue muchas veces acusado de fascista, antisemita, intolerante u homofóbico, él responde “una vez más voy con la verdad para adelante” y "no es cualquier cosa tener razón, es dar la vida poniendo el pecho". Su público lo apoya: "los que lo atacan pecan de ignorantes, no tienen ni idea. Él es lo mas grande del heavy nacional" estableció Mauro, un joven metalero de pelos largos y negros, a lo que Sebastián, su acompañante agregó: “hoy todos prefieren buscar a Ricardo en Youtube para reírse, pero cuando se sube a un escenario es cosa seria y las cosas que dice allá arriba le abren la cabeza a muchos y se las hace doler a otros”.

Como es la costumbre de la banda, se despidió por un largo tiempo de la región. Dejó corazones contentos, pero no del todo conformes “estuvo espectacular pero me hubiera gustado que toque más tiempo, unas tres horas más" contó Alan de General Roca mientras se retiraba del boliche a buscar el colectivo que lo devolviera a su ciudad.